Tratamiento de relleno ácido hialurónico
La función biológica del ácido hialurónico es la de atraer y retener agua en los tejidos.
Con el paso del tiempo, el ácido hialurónico de nuestro cuerpo va progresivamente disminuyendo. Consecuentemente, aparecen los signos de envejecimiento y oxidación celular. Es lo que percibimos como la pérdida de firmeza, la falta de hidratación y elasticidad, o la aparición de manchas y arrugas. Afortunadamente, hoy en día contamos con distintos tipos de ácido hialurónico para reducir visiblemente los signos de la edad.
Es un tratamiento de varios pasos, personalizables para cada paciente, que brinda una experiencia agradable y completa. Tras cada sesión, la piel tiene un aspecto mucho más brillante y cuidado.
¿Qué es el ácido hialurónico?
Es una sustancia que se encuentra de forma natural en nuestro organismo, que la ciencia ha reproducido para su aplicación en tratamientos de medicina estética.
¿Qué tipo de ácido hialurónico usamos para rellenos faciales?
Seguro que has oído hablar de los rellenos faciales a base de ácido hialurónico. Pues bien, hay mucho más. Existen varios tipos de ácido hialurónico que se administran en tratamientos faciales según las necesidades del paciente y la zona a tratar.
Para los tratamientos de Medicina Estética, podemos encontrar dos tipos de ácido hialurónico, el utilizado para hidratación y el utilizado para rellenos.
Los productos de rellenos pueden ser de tres tipos:
● Baja densidad, para tratar las arrugas finas peribucales
● Densidad media, para surcos nasogenianos
● Alta densidad, para reponer volúmenes en lugares como pómulos y mentón.
En el caso de utilizarlo para la hidratación, el ácido hialurónico está compuesto por moléculas libres. Por este motivo, no generan volumen, y sí mejoran la hidratación en el área a tratar. Es muy común utilizarlo en labios para mejorar su aspecto sin modificarlos.
